No hay mejor lugar que los brazos de mamá

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Fotos de bebés felices

Como sabréis, hace unos días puse en marcha un concurso fotográfico en mi página de facebook

Ya han llegado todas las fotografías y ahora empieza el plazo para votar. Hay una fotos preciosísimas, lástima que yo tenga que ser imparcial y no pueda votar a nadie, aunque tampoco podría decidirme……….

Os dejo aquí los enlaces a los dos álbumes, para que las veáis, las comentéis y las compartáis, y así damos difusión al concurso y sobre todo, al porteo ergonómico. Haced comentarios en las fotos que más os gusten.

Bebés felices en portabebés

Bebés felices en brazos

¡Muchas gracias!

¿Por qué los bebés africanos no lloran?

Hoy he traducido un artículo que me ha parecido muy interesante. Se basa en que los bebés africanos no lloran, porque básicamente, viven colgados del pecho de sus madres, son porteados continuamente y maman a todas horas. Pertenece a este blog. Es un fragmento del libro de Niala In culture parent.

La Dra. J. Claire K. Niala es madre, escritora y osteópata que disfruta explorando las diferencias que afortunadamente todavía existen entre las diversas culturas de todo el mundo. Ella nació en Kenia y creció en Kenya, Costa de Marfil y  Reino Unido. Ha trabajado y vivido en tres continentes y ha visitado al menos un nuevo país cada año desde que tenía 12 años de edad. Sus compañeras de viaje favoritas son su madre y su hija, cuyas historias e interés por los demás, la ha llevado a comprometerse con el mundo de un modo que nunca habría imaginado.

Nací y crecí en Kenia y Costa de Marfil. A los quince años me fui a vivir a  Reino Unido. Sin embargo, siempre supe que quería criar a mis hijos (cuando los tuviera) en mi casa en Kenia. Y sí, asumí que los iba a tener. Soy una mujer africana moderna, con dos títulos universitarios, y la cuarta generación de  mujeres trabajadoras, pero cuando se trata de niños, soy típicamente africana. La realidad es que tú no estás completa sin ellos, los niños son una bendición y hay que estar loco para evitarlos. En realidad, la cuestión ni siquiera se plantea. 

Comencé mi embarazo en el Reino Unido. El deseo de dar a luz en casa era tan fuerte que dejé mis prácticas, mi nuevo negocio y me mudé de casa y de país a los cinco meses de descubrir que estaba embarazada. Hice lo que la mayoría de las madres embarazadas en el Reino Unido hacen –  leí vorazmente: “Our Babies, Ourselves”, “Parenting Incondicional”, cualquier cosa de Sears – y la lista sigue. (Mi abuela comentó más adelante que los bebés no leen los libros y todo lo que realmente necesitaba era «leer2 a mi bebé). Todo lo que leía decía que los bebés africanos lloran menos que los bebés europeos. Y estaba intrigada en saber por qué.

Cuando volví a casa, observé. Busqué a madres y bebés y estaban por todas partes, aunque los bebés más pequeños, de menos de seis semanas, estaban principalmente en las casas. Lo primero que noté es que a pesar de estar en todas partes, en realidad es muy difícil «ver» a un bebé keniata. Por lo general están muy bien envueltos, antes de ser porteados por su madre (a veces el padre). Incluso los bebés mayores atados a la espalda están protegidos de la intemperie por una manta grande. Tendrías suerte de ver una extremidad, no digamos un ojo o la nariz. La envoltura es como una réplica del vientre materno. Los bebés son literalmente, protegidos en un capullo del estrés del mundo exterior en el que están entrando. 

Mi segunda observación fue de índole cultural. En el Reino Unido, se entiende que los bebés lloran. En Kenia, era todo lo contrario. La normal es que los bebés no lloran. Si lo hacen, hay algo terriblemente mal y hay que hacer algo para corregirlo inmediatamente. Mi cuñada inglesa lo resumía así: «a la gente realmente no le gusta que los bebés lloren ¿verdad?» 

Todo tuvo mucho más sentido cuando finalmente di a luz y mi abuela vino de la aldea para visitarnos. Dio la casualidad que mi bebé hizo lloraba mucho. Exasperada y cansada, se me olvidó todo lo que había leído y algunas veces me unía a su llanto también. La solución para mi abuela era simple, «Nyonyo amamántala! “Esa era su respuesta a cada quejido.

Hubo momentos en que se trataba de un pañal mojado, o que la había soltado, o que necesitaba eructar, pero mayormente, lo único que ella quería era estar en el pecho. No importaba si estaba comiendo o simplemente descansando. Yo la porteaba la mayoría del tiempo y dormía (colechaba) con ella, así que esto fue una extensión natural de lo que estábamos haciendo. 

De repente aprendí el no tan difícil secreto del alegre silencio de los bebés africanos. Era una simbiosis sencilla entre necesidad y conocimiento, que requería la suspensión total de las ideas prefijadas de lo que debería ocurrir y el abrazo de lo que realmente estaba pasando en ese momento. La conclusión fue que mi bebé se alimentaba mucho, mucho más de lo que yo había leído, y al menos cinco veces más que algunos de los programas de alimentación más estrictos que había visto

Sobre  los cuatro meses, cuando una gran cantidad de madres urbanas comienzan a introducir los alimentos sólidos como recomiendan algunas guías de alimentación para bebés,  mi hija volvió a su estilo de lactancia de bebé recién nacido, mamando cada hora, lo cual fue un shock total. En los últimos cuatro meses, el tiempo entre una toma y había comenzado a espaciarse lentamente. Incluso había comenzado a tratar a pacientes sin que mis senos gotearan  o la niñera de mi hija interrumpiera la sesión para hacerme saber que mi hija necesitaba mamar.

La mayoría de las madres de mi grupo de mamás y bebés había empezado a introducir arroz para bebés (para alargar las tomas) y todos los profesionales involucrados en la vida de nuestros hijos, pediatras, incluso doulas, decían que era correcto. Decían que las madres necesitaban descansar también, que lo habíamos hecho increíblemente bien por haber amamantado en exclusiva durante cuatro meses, y nos aseguraron que nuestros bebés estarían bien. Algo no me sonaba real e incluso cuando trataba, con poco entusiasmo, de mezclar un poco de papaya (la comida tradicional de destete en Kenya), con leche extraída y ofrecérsela a mi hija, ella no tomaba nada.

Así que llamé mi abuela. Ella se rio y me preguntó si había estado leyendo libros de nuevo. Con mucho cuidado, me  explicó cómo la lactancia materna era cualquier cosa menos lineal. » Ella te dirá cuando esté lista para comer, y su cuerpo también lo hará. » 

«¿Qué voy a hacer hasta entonces?” Estaba ansiosa por saberlo

«Haz lo que hacías antes, Nyonyo, tienes que ser regular»

Así que mi vida que mi vida se desaceleró a lo que parecía un punto muerto otra vez. Mientras muchas de las madres de mi grupo se maravillaban de cómo sus hijos dormían durante más tiempo ahora que habían introducido el arroz para bebés, e incluso se aventuraban con otros alimentos, yo me despertaba cada una o dos horas con mi hija, y tenía que decirle a mis pacientes que la vuelta al trabajo no iba a ser como lo había planeado. 

Pronto me di cuenta de que, inconscientemente, me estaba convirtiendo en un servicio de apoyo informal para otras madres. Mi número de teléfono pasaba de mano en mano y muchas veces, mientras daba de mamar a mi bebé, podía oírme a mí misma diciendo: «Sí, sólo tienes que seguir amamantándola. Sí, incluso aunque acabes de darle de mamar. Sí, posiblemente no seas capaz ni de quitarte el pijama en todo el día. Sí, todavía necesitas comer y beber como un caballo… No, ahora puede que no sea el momento de volver a trabajar si puedes permitírtelo. «Y, por último, le aseguraba a las madres: » Va a ser más fácil a partir de ahora.» Yo misma tuve que creerme esto último, aunque para mí, todavía no se había vuelto más fácil.

Aproximadamente una semana antes de que mi hija cumpliera cinco meses, viajamos  a Reino Unido para una boda y para que conociera a la familia y amigos. Como tenía muy pocas exigencias, podía mantener fácilmente su horario de alimentación. A pesar de las miradas desconcertadas de muchos extraños cuando alimentaba a mi hija en diferentes lugares públicos (la mayoría de las designadas salas de lactancia estaban en baños que yo no habría utilizado para mí misma), nosotras seguimos adelante.

En la boda, la gente de la mesa donde nos sentamos señalaba: «Ella es como un bebé tranquilo, aunque se alimenta mucho». Yo guardaba silencio. Otra mujer comentó, “Leí en algún sitio que los bebés africanos no lloran mucho”. No pude evitar reírme.

 

La sabiduría de mi abuela:

1-    Ofrece el pecho a cada momento que tu bebé se sienta mal, incluso si ya lo has alimentado.

2-   Colecha (duerme con tu bebé). Muchas veces puedes alimentar a tu bebé antes de que esté completamente despierto, lo que os permitirá volver a dormir más fácilmente  y descansar mejor.

3-    Lleva siempre una botella de agua templada a la cama, lo que te permitirá hidratarte y hacer que la leche fluya.

4-   Aliméntate correctamente (sobre todo durante el periodo de crecimiento) y que toda la gente a tu alrededor te ayude en todo lo que pueda. Hay muy pocas cosas que no pueden esperar.

5-   Lee a tu bebé, no leas libros. La lactancia maternal no es lineal, va arriba y abajo, e incluso en círculos. Tú eres la única experta en lo que tu bebé necesita.

Miércoles Mudo

El hermano mayor porteando a la pequeña

El hermano mayor porteando a la pequeña



Beneficios del porteo: en la cocina

Cuando tenemos un bebé, a veces resulta complicado realizar las tareas domésticas. Pero resulta, que tenemos que hacer la comida y nuestro pequeño no quiere estar ni un minuto solo (normal!!!).

Si el bebé es muy pequeño, podemos dejarlo en la cuna o moises, pero como los bebés tienen un radar de alejamiento incorporado, en cuanto intentemos salir de la habitación, seguro que se despierta y se pone a llorar.

Si el bebé es más grande, a lo mejor se entretiene un rato jugando en el parque, pero seguro que salimos para ir a la cocina y ya no quiere estar allí.

En niños más grandes, podríamos dejarlos jugando cerca nuestra, pero resulta que la cocina es el lugar más peligroso de la casa.

Solución: llevamos al bebé en el portabebé y todos felices. Ellos están contentos porque están con mamá, que es lo que realmente quieren, y nosotros podemos entrar a la cocina y preparar esa rica comida que teníamos planeada. He aquí otra de laa innumerables ventajas que nos ofrece el uso de un portabebé.

Como todas las cosas, hay que hacerlas usando el portabebé correctamente y con cabeza. En la cocina, es mejor llevar el bebé a la espalda, nos deja las manos libres y no hay riesgo para ellos. Pero hay que ser conscientes de que estamos porteando, lo normal es moverse con cuidado, no dar nunca la espalda a los fogones ni a la encimera, por riesgos de salpicaduras a nuestros pequeños.

Yo nunca manejo el horno con la niña, el horno sólo para cuando hay alguien en casa que puede estar pendiente. Por lo demás, el resto de las comidas las hago perfectamente con ella a la espalda, está protegida con mi cuerpo ante una eventual salpicadura, aunque es cierto que las cosas que considero más peligrosas, también las dejo para otro momento.

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Hasta la próxima ventaja.

La nueva mochila de esa marca impronunciable.

Acabo de ver la publicidad de esta mochila y ya me tiembla el ojo…. Está previsto que salga al mercado dentro de poco. La publicidad es muy mona, eso sí, modelos estupendos para enseñar una mochila, que como siempre, no cumple con su cometido de ser ergonómica, aunque ellos digan que sí. Aggggggggg, ya estamos, la cantidad de dinero que invierte esta marca en publicidad, cuando podían hacer una mochila realmente en condiciones………..

Esto es lo que veo:

El bebé de dos meses, va colgado, literalmente. Las piernas están estiradas hacia abajo, nada de mantener la postura ranita. La modelo que lo lleva no puede darle un beso en la cabecita sin partirse ella misma la espalda, va muy bajo.

El bebé de ocho meses, pobrecito mío, va mirando al frente, con la espalda forzada en el ángulo contrario y, evidentemente, las piernas colgando también. Un poco más abajo os cuento porqué no deberían mirar al frente.

El de quince meses, lleva las piernas más abiertas, imagino que llevará la mochila alguna pieza para conseguirlo, porque el frontal parece más ancho que las imágenes de antes. Eso sí, sigue siendo una pieza bastante rígida. Y también va muy abajo. Ya me gustaría a mí ver a ese padre después de un paseo con la mochilita de 1 hora, iba a estar para el arrastre.

Y el de tres años, va a la espalda de papá, pero ya con las piernas colgando, claro, la mochila no da para tanto.

Después de ver el anuncio, me he ido directamente a su página, a ver todos los detalles de cerca. http://www.babybjorn.com/one

Pone que la mochila ha sido desarrollada en colaboración con pediatras, claro, si a un pediatra la pagas, te dirá que es magnífica y estupenda. Aunque seguro que no le han dado la mochila a un fisioterapeuta o una experta en porteo, porque, indiscutiblemente, les van a decir que la mochila no es ergonómica para nada. Hasta han puesto los testimonios de estos pediatras, que sabrán mucho de medicina, oiga, e incluso de los beneficios de llevar a los bebés en brazos, porque de eso sí hablan, pero no parecen saber mucho sobre la fisiología de los bebés, porque dicen que “proporciona la posición ideal para las piernas del bebé”….

También dicen que han tardado más de 1000 días en desarrollar la mochila. Jolines, ya podían haber invertido ese tiempo en intentar hacer una mochila ergonómica en condiciones. Porque, vamos a ver, poderse, se puede. No hay más que mirar al mercado y ver la cantidad de buenas mochilas ergonómicas que tenemos (Boba, Ergobaby, Manduca, Emeibaby, Tula, Patapum………..), claro, que no invierten tanto en publicidad y por eso no son tan conocidas.

Me voy directamente a las instrucciones de uso. Así por encima, veo que hay unas hebillas para sujetarles las piernas a los bebés….

Y la mochila consta de unas cremalleras para ajustar las piernas en distintas posiciones (pone, “comprueba siempre que la cremallera está cerrada”, ufffff, como no la cierres bien, seguro que algún pellizco se lleva el pobre bebé). Lo que hacen las cremalleras es disminuir el tamaño del puente, pero para los bebés menores de 68 cm (es lo que especifican ellos), el puente es tan estrecho que las piernas están colgando. A partir de los 68 cm ya se puede llevar al bebé con las piernas abiertas!!!! (Antes no, por favor,¡¡¡¿¿¿ como va a ir un bebé con las piernas abiertas y la espalda arqueada en posición ranita???!!!).

Las instrucciones son la leche. Primero te pones la mochila como si fuera un jersey y luego vas soltando soportes y hebillas para meter al bebé dentro. Con lo fácil que son de usar las mochilas ergonómicas, que abrochas la cintura y ya colocas al bebé y terminas de subir el cuerpo de la mochila por su espalda…

A partir de los 5 meses ya puedes poner al bebé mirando hacia afuera y con las piernas en posición normal, colgando, es decir, el bebé va en posición “anti ranita”. Ains, me entra de todo cada vez que me cruzo por la calle con alguien que lleva a su niño en esa postura. Si puedo, me acerco a decirles algo, aunque la mayoría de las veces me miran con cara de “¿y tú a que te metes?”. Un día me van a soltar alguna fresca. Llevar al bebé mirando hacia afuera hace que se pierda la posición fisiológica, las piernas están colgando, la cabeza del fémur no está en su sitio y la espalda está arqueada en sentido contrario. Además, el bebé que mira hacia al exterior está expuesto a cantidad de estímulos de los que no puede defenderse, no puede buscar el calor y el consuelo en el pecho de mamá.

Por último, dicen que a partir de los 12 meses ya se puede llevar al bebé a la espalda. Pues, señores míos, un bebé correctamente porteado puede ir a la espalda desde el nacimiento, con un fular correctamente colocado, el bebé está perfectamente. Es cierto que a veces no usamos la postura a la espalda hasta que son más grandes, pero porque cuando son más pequeños, parece que nos da más seguridad llevarlos al frente y tenerlo bajo nuestra atenta mirada. Pero en otras culturas, donde el porteo está ampliamente extendido y es lo normal, las madres cargan a sus bebés a la espalda desde el nacimiento, mientras ellas pueden seguir haciendo otras cosas. Claro, esta mochilita no proporciona soporte para la cabeza cuando la pones a la espalda, normal que no puedas ponerte al niño antes.
Y del cuerpo de la mochila aún no he dicho nada. El cuerpo es rígido, está como acolchado, por lo que mantiene la espalda del bebé en una postura muy estirada, no permite que se curve hacia adentro, como lo debería hacer naturalmente.

Ya me he explayado. Iba a poner sólo el vídeo, pero es que me enciendo cuando veo estas cosas y ya he dado rienda suelta a mi rabia. Desde luego, la próxima vez que inviertan tanto tiempo en diseñar una mochila nueva, les aconsejo que se cojan una mochila ergonómica e intenten copiarla un poco, que les saldría mucho mejor.

Imagen

Tenemos concurso

Estos días estamos de concurso. Es un concurso fotográfico, me encanta ver bebés felices en brazos, bebés porteados.

Las bases son las siguientes:
1- Todo el mundo puede participar con un máximo de dos fotografías por categoría.
2- Categoría portabebés: Solo fotos de bebés porteados. El premio para esta categoría es un fular Boba Wrap o un Tonga, a elegir en http://www.felizenbrazos.com. Un único ganador.
3- Categoría en brazos: Solo fotos de bebés en brazos. El premio para esta categoría, un vale descuento de 10% para gastar en http://www.felizenbrazos.com. 3 ganadores.
4- Las fotografías se mandarán por correo electrónico a info@felizenbrazos.com autorizando a felizenbrazos a publicarlas, con nombre y DNI. Estos datos no serán revelados.
5- Recepción de fotografías hasta el 05/04/2013.
6- Al finalizar el periodo de recepción de fotografías, se crearán dos álbumes distintos, y se abrirá el periodo de votación.
7- Se recomienda compartir el concurso públicamente, para que vote más gente.
8- El ganador (o ganadores) será la fotografía que más comentarios y más “me gusta” sume.
9- En caso de empate, se realizará una ronda rápida de votación con las fotografías empatadas.
10- El concurso es válido sólo para España.

¿Os animáis a concursar?

Beneficios del porteo: bajo la lluvia

Como me encanta el porteo y sus beneficios, quiero abrir una sección nueva, en la que cada semana, voy a explicar un beneficio o ventaja de usar los portabebés.

Algunos de estos beneficios son bastante obvios, como todas las cosas buenas que aporta a los bebés. Pero también hay algunas ventajas para las mamás. Cuando digo mamás, también digo papás o abuelos o cualquiera que portee al bebé, pero en este caso, ruego se me disculpe, pero ¡¡¡voy a decir siempre mamá!!!

Porque, seamos sinceros, no todo el mundo utiliza un portabebé por el mismo motivo. Y todos los motivos son igualmente válidos. Habrá mamás que quieran llevar a su bebé bien pegadito para aportarle calor, facilitarle la lactancia, que llore menos, que no tenga cólicos, para acelerar el vínculo…. Pero también puede ser que alguna quiera un portabebé sólo para poder hacer las tareas de casa con más facilidad. No nos importa el porqué, lo que importa es que los bebés estén felices en brazos, jejeje.

Pues vamos con la primera de estas ventajas.

Un día de lluvia, tenemos que salir a la calle con nuestro bebé. Y la verdad es que las alternativas son bastante incómodas. Los bebés suelen ir en su silla de paseo, tapados con el plástico ese que impide que se mojen (y que a mí me agobia un poco, personalmente, parece que están en un invernadero….pero seguro que están a gusto allí dentro, eh, que además, no les da el aire tampoco, no quiero criticar). Pero, ¿y la mamá que empuja el carro? Pues la mamá, o bien se moja totalmente, o se pone un chubasquero, o, el más difícil todavía, sujeta el paraguas con una mano, mientras con la otra hace malabarismos para empujar el carro y todo eso, intentando no mojarse.

Y por fin, llega la alternativa del porteo. Mamá y bebé porteados, con cualquier portabebé ergonómico, bajo un gran paraguas, no se moja ninguno de los dos y además, mamá puede ir dándole todos los besos que quiera. ¿A que suena bien?

portabebé bajo la lluvia

Las imágenes de bebés en carros han sido tomadas de la red

Hasta la próxima ventaja

Nuevos modelos de mei tai

Os enseño los últimos mei tais que hemos realizado por encargo. Ya están disfrutando del porteo varios bebés.

Mei tai con cabecero acolchado, reversible, con reductor del tamaño del puente, para hacerlo apto a bebés más pequeños:
mei tai cabecero acolchado reversible 2mei tai cabecero acolchado reversible 3

Mei tai que combina la loneta azul en tirantes y cintura con una loneta gris rayada, de aspecto vaquero:
mei tai azul con loneta vaquera

Original mei tai con calaveras, para las madres más rockeras:
mei tai calaveras

Mei tai especial para soñar, lleno de estrellas. Es reversible, azul por un lado y morado por el otro, pero las estrellas, que no falten:
mei tai reversible estrellas mei tai reversible estrellas3

Y este mei tai, colorido y original. Un pedido especial para una mamá muy alegre. Es reversible, para poder lucirlo indistintamente. Los tirantes y la cintura, también son de colores combinados:
mei tai reversible letras círculos2 mei tai reversible letras círculos3

Si os gustan, pasad por la tienda, podemos hacer uno igual o personalizarlo a vuestro gusto.

Feliz porteo

Mei tai delante

Cómo ponerse un mei tai delante.