Llevo varios días intentando escribir esto, pero no puedo por falta de tiempo, que no por falta de ganas. Todas las mañanas, todas sin falta, me pasa lo mismo.
Trabajo en un hospital. En una zona, donde cada día, pasan niños a los que tenemos que hacerles pruebas y/o analíticas, curas y otros procedimientos. Niños que vienen asustados, que no saben que les van a hacer y a los que se les realizan actos más o menos invasivos. Todos, absolutamente todos, lloran. Normal ¿ verdad?
Porque lo que me remueve por dentro cada día, es que parece que NO es normal. Algunos compañeros de profesión, regañan a los niños por llorar, por portarse “mal”, por revolverse. Pero ahí no acaba todo. Los propios padres, les regañan hasta la saciedad, les amenazan con quitarles cosas e incluso he llegado a ver algún cachete a niños que rato después de la prueba seguían llorando desconsoladamente.
No puedo con estas escenas. Ni con los comentarios injustos que se les hacen a los niños. He visto a personal sanitario regañar a los niños por gritar o llorar, llamarles maleducados, amenazarles con echar a sus padres de la sala por no dejarse hacer una prueba. Y al final, se lo hacen a la fuerza, con más miedo y dolor por parte del niño.
La otra parte que no consigo entender, es la de muchos padres. Llevan a sus hijos al médico, les sacan sangre o les hacen unas pruebas bastante dolorosas y molestas, ¿qué es lo que esperan? «¿que sean niños buenos?» Los niños están asustados y necesitan el apoyo de las personas en las que más confían. Pero, si después de todo, sus padres les regañan y castigan, ¿cómo van a calmarse esos pequeños? Por favor, ¿tan difícil es ponerse a su altura? Agacharse, abrazarlos, explicarles en la medida de lo posible, calmarlos. Entender que simplemente, son niños, que están asustados, que les han hecho daño y que necesitan consuelo, no unos padres que les regañen por llorar.
¿A cuántos adultos no les gusta que les saquen sangre, por ejemplo? A muchos. Y nos dejamos hacer los análisis porque entendemos que es una necesidad. Pero, un niño pequeño, no entiende ese concepto, no entiende que por su bien, que en la sangre hay un montón de compuestos que una máquina analiza en el laboratorio y con eso saben si está enfermo o no…. Y como no lo entienden, somos nosotros los que tenemos que entender su miedo, su dolor, y calmarlos y tranquilizarlos. Si andando por la calle, nuestro hijo se cae y se hace una herida, corremos a socorrerle. Entonces, si en el hospital le hacen una prueba dolorosa, ¿por qué no hacemos lo mismo?
Yo he probado una técnica diferente. Hablar, dialogar, explicarles, adaptándonos a la edad de cada uno, dejarles que se relajen, darles un tiempo para que salgan de la consulta y fuera se queden más tranquilos antes de volver a entrar. Y explicarles el cómo y el porqué de las cosas. Hacerles saber que es normal tener miedo y dejarles expresar sus sentimientos. La mayoría de las veces, funciona, desde luego, mejor que las amenazas y las fuerzas. Y si no me entienden, siempre lo hago con una sonrisa, a ser posible, que estén sentados y abrazados a sus padres. Los padres también tienen un papel importante en todo esto, más que nosotros, evidentemente. Antes de llegar a la consulta, en casa, tienen que contarles lo que les van a hacer, sin darle importancia, tomarlo como algo natural y necesario. No sirve de nada que los padres lleguen asustadísimos por lo que se les va a hacer a sus hijos, porque transmiten ese miedo a los pequeños.
El otro día, mi amiga Lorena me comentaba una escena parecida. Llevó a la niña, de apenas 14 meses, a hacerse una analítica. La niña iba asustada, a esa edad, casi todos los bebés temen las batas blancas, porque las relacionan con las vacunas y las revisiones periódicas. Al llegar a la sala de extracciones, una persona le sujetó el brazo a la fuerza para que la enfermera pudiera pincharla, sin avisar, sin mediar palabra. El susto de la pequeña era aún mayor, y, evidentemente, su instinto le hacía retirar el brazo. La niña lloraba, chillaba y se revolvía y una de las personas que estaba en la sala, empezó a decir que la niña era una soberbia, que vaya genio tenía. Se lo decía a la madre, directamente. La madre, en ese momento, se quedó tan cortada que no supo qué responder. Y además, estaba más pendiente de atender a su hija. Pues ahora aprovecho yo para decirle a esa persona, en primer lugar, que si trata con niños, debería tener más paciencia y sobre todo, más empatía. Y en segundo lugar, que se informe antes de soltar palabras por su boca, porque, según la RAE, Soberbia, en su cuarta acepción significa «Cólera e ira expresadas con acciones descompuestas o palabras altivas e injuriosas». Y esta niña no sentía ira, lo que sentía era miedo, y no se expresaba con acciones descompuestas ni palabras altivas, lloraba e intentaba zafarse porque es lo que le pedía su instinto de supervivencia.
Todos los días, veo estas escenas. Todos los días, salgo con mal cuerpo, viendo como no se respeta el miedo de los pequeños, escuchando comentarios que no deberían hacerse. Todos los días, me acerco a algún pequeño y le llevo un dibujo y unos lápices, para que coloreen y olviden el mal rato, y todos los días, un gesto tan simple como este, funciona. Todos los días, quiero agacharme y abrazar a todos esos niños asustados a los que sus padres regañan. Todos los días…
EDITADO
Para la gente que sólo lee entre líneas, hago una aclaración.
NO digo que todo el personal sanitario trate mal a los niños, ni muchísimo menos. Por suerte, hay muchos grandes profesionales sanitarios que se dedican a hacer las cosas más fáciles a los pequeños. Digo, que por desgracia, he tenido que ver y sigo viendo cada día, gente que en mi opinión, no está capacitada para tratar con niños. Evidentemente, para ciertos procedimientos, hay que sujetar a los niños, pero no es lo mismo sujetar un brazo para una analítica con una sonrisa y palabras dulces que hacerlo de malas maneras. En mi trabajo, estoy rodeada de grandísimos profesionales y también, de compañeros que no merecen ese calificativo.
NO digo que todos los padres que ven llorar a sus hijos por quejarse y tener miedo, les regañen y les castiguen. Por suerte, la mayoría de los padres entienden que los niños están viviendo una situación traumática para ellos y les consuelan. Por desgracia, también he visto y sigo viendo a padres, que sí les regañan por llorar, padres que gritan a sus hijos porque les están «dejando en ridículo» (palabras dichas por los propios padres).
No pretendo, ni mucho menos, menospreciar el trabajo del personal sanitario, ni pretender ser la mejor y la más «guay». Este post es sólo para plasmar una realidad que veo cada día. No considero que yo lo haga mejor que nadie, repito que tengo la gran suerte de trabajar con muchas personas fantásticas, que tratan a todo el mundo con respeto. Esto es sólo una opinión, una visión, MI opinión
Quiero aprovechar para alabar a la enfermera de mi hija, que siempre, cuando ha habido vacunas, se las ha puesto con mi hija en brazos y me ha animado a hacer «tetanalgesia» para que el dolor fuera menor. La sanidad tiene grandes profesionales.
Comentarios en: "Las lágrimas de los niños" (65)
De verdad que enhorabuena por pensar así 🙂 Mi hija estuvo ingresada y fue una experiencia muy desagradable. Tuve que soportar comentarios como que «está mimada» y similar, y la niña lo que tenía era un gran susto. No sabes el gusto que me da leer tu artículo, personas empáticas y conscientes de lo que significa un «ser humano niño» es lo que necesita esta sociedad.
Un abrazo,
RAquel
¿En serio les regañan por llorar en esa situación? Mi bebé aún es pequeño, y por suerte no le han tenido que hacer ninguna prueba aún, tan sólo las vacunas de los 2 meses, pero creo que si tuvieran que hacerle pruebas médicas y llorase, mi reacción sería la de abrazarle, no la de regañarle, cuando los niños lloran, lo normal es que lo hagan por algún motivo, y no se merecen nuestro enfado! Me alegro de que esos niños por lo menos te encuentren a ti en ese momento.
Enhorabuena por el post!
Diana, como te conozco y se lo empatica y lo buena que eres, se que lo estarás pasando fatal.Gracias por darnos esas pautas y recordarnos, aunque sea de perogrullo que no podemos ni debemos meterles mas miedo en el cuerpo.me ha encantado el post, un beso grande
Qué suerte tienen esos peques que se encuentran contigo… Ojalá todo el personal sanitario tuviera la misma empatía y las mismas ganas de hacer el bien…
Creo que el GRAN problema es lo de siempre: el qué dirán. Entiendo que esos padres que regañan a sus hijos lo hacen porque creen que es lo que se espera de ellos, puede que estén más pendientes de la gente de alrededor, y sobre todo el «médico», esa figura que muchos ven como «superior» y «ejemplo». Igual no soportan que sus hijos «queden mal» delante de él…
Gracias por este post, estoy segura que hará recapacitar a más de un papi/mami.
¡Un placer leerte!
Es tremenda la lectura que hacen algunos adultos ante los miedos e inquietudes de los más peques: en vez de entenderles y tranquilizarles les regañan y les ponen más ansiosos… Pero al menos hay profesionales como tú, respetuosos y que acompañan al paciente en esos momentos de tanta angustia.
Un abrazo!
Ay, Diana. Es triste ver cómo hay profesionales sanitarios que tienen tan poco tacto, con niños y adultos. En mi sesión de urgencias de la semana pasada me topé con un par de frases nada adecuadas para el momento que estaba pasando. Pero bueno, soy una persona adulta que sabe cuándo pasar del tema, pero ¡¡un niño!! Por favor, a los niños no se les puede tratar así. Afortunadamente hay gente tan valiosa y estupenda como tú, que sabe tratarles como debe ser. Ojalá se les pegue a los demás todo lo bueno que tienes. ¡¡Y gracias por ser el personal sanitario que a todos nos gustaría que nos tocara!!
Diana me ha encantado este post!!!! ojalá lo leyeran muchos papás, mamás y personal sanitario sin sentimientos y sin capacidad de empatía. Y ojalá nos encontraramos siempre con gente como tú…ayyyyy por favor, si ver llorar y sufrir a un niño parte el alma!!!! con lo poco que cuesta una palabra, una caricia, una mirada de estoy contigo tranquilo que no te va a pasar nada…
Un besazo enorme.
Con 1 añito mi hijo estuvo ingresado y lo que mas me tranquilizó es que cuando me mandaron salir para ponerle la via yo oí tras la puerta a las enfermeras decir a mi hijo: Tranquilo bonito que ya acabamos,no pasa nada precioso.
Le hablaban con tanta dulzura que supe que estaria bien.
Jamas se me ocurriría reñirle por que llora por que le han pinchado o le han curado una herida. Me ha gustado mucho el post,ojala todas las mamis,enfermeras,pediatras etc fueran así,se me parte el alma ver a un niño en el hospital y que encima le regañen por llorar.
Un beso.
Ay qué pena!!!!! Yo he tenido suerte con la enfermera que pinchó a Daniela la primera vez, fue súper rápida, me dijo que la sostuviese en brazos y que en cuanto terminase le diera el pecho para ofrecerle consuelo y la verdad es que el berrinche duró poco y fue corto el mal rato. Sólo quería compartir que también hay gente como tú y espero que cada vez más. Ahora he cambiado de centro de salud y a ver qué pasa…miedo me da por lo que cuentas!
Gracias por compartirlo 😉
Entiendo tu manera de pensar y tu frustración. Tienes mucha entereza para trabajar en lo que haces sin perder la cabeza. Te admiro.
Un abrazo desde Budapest
Siempre que han pinchado a no han pinchado a mi pequeña enganchada en la teta, me han dejado cojerla en bracitos y achucharla… no se como hubiera actuado si no hubiera sido así… no puedo resistirme a ver un niño llorar sin intentar consolarle…
Si entiendo mal que el personal sanitario no sepa tratar a un niño que está asustado y muerto de miedo no te digo ya unos padres. Estamos para proteger a nuestros hijos incluso de sus miedos, si estamos asustados ante cualquier prueba médica, ante una situación desconocida imaginémonos un niño. Además creo firmemente que con buenas palabras y cariño se consigue mucho más que con gritos y malos modos. Ay Diana, ojalá más gente fuera como tú de empática y buena profesional. Un besín reini.
¡¡Ay el personal sanitario!!! Yo he pasado muchas, muchas horas con mi peque en el hospital y he visto de todo: personas agradables, desagradables, dulces, secas… de todo. Pero JAMÁS se me ha ocurrido reñir a mi peque; al contrario, cuando han tenido que sacarle sangre o pincharle por algo algo ahí estaba yo para cogerlo y consolarlo. Hasta que he leído tu post no he pensado que hubiera otra manera de actuar más que esta. Sin duda, en el mundo hay de todo.
Que suerte tienen los y las peques que se cruzan contigo.
Saludos gigantes
Mi hijo por suerte está muy sano, son 4 años. Pero la semana pasada hubo q sacarle sangre, yo le preparé en casa explicandole que le iban hacer y porqué. Su respuesta fué; «Mami si tu estas conmigo yo aguantaré» Ojos como platos se me quedaron, tan chico y tan mayor….
Cuando llegamos a enfermería, me querían dejar fuera «Porque los niños se portan mal con los padres delante» Y dije q si yo no entraba con él, me iba sin sacarle la sangre. Al final de mucho rifi-rafe me dejaron cojerlo sentada y el solito puso su bracito y se dejó hacer. No dijo ni ay! y aún así el que sacaba sangre se quejó porque habia dado un pequeño respingo….
Se necesita mas enfermeros, medicos, maestros….etc… que se pongan en su lugar, que piensen como tú.
No quiero ni pensar que hubiese sido de mí en mis partos, si no hubiera tenido a mi marido conmigo, creo q todo hubiese dolido más, y no lo hubiese disfrutado como realmente lo hice.
Creo q se espera q los niños reaccionen siempre como los adultos, y no es justo para ellos.
OJALA HUBIESE MAS PROFESIONALES EN LA SANIDAD COMO TÚ, PORQUE YO VEO LAS ENFERMERAS DE PEDIATRIA QUE ESTAN TODO EL DIA CON NIÑOS Y NI UNA SONRISA, NI UNA MUESTRA DE CARIÑO, VAMOS NA DE NA Y YO QUE SOY PELUQUERA Y LOS NIÑOS AL VERNOS CON BATA TB NOS TIENEN MIEDO E INTENTAS CALMARLOS O LO QUE SEA PARA CORTARLOS EL PELO, MI PEKE LA SEMANA PASADA CON 12 MESES Y MEDIO LE HICIERON UNA ANALITICA COMPLETA PERO NO SE COMO LA HICIERON NI NA PORQUE ME LO LLEVARON PARA UNA SALA Y ESTABAN 2 CHICAS CON EL, PERO AYER QUE LE HICIERON UNA RESONANCIA LA ENFERMERA DEL BOX DE URGENCIAS SUPER MAJA CON EL PORQUE ESTABA SEDADO Y ESTABA DESPERTANDO Y ME DIJO COJELE MAMA HABER SI SE CALMA UN POQUITO PORQUE EL POBRE SE LE JUNTO TODO TENIA SUEÑO Y HAMBRE (q eran las 5:30 de la tarde y llevaba desde las 4 de la mñn sin comer) Y ESTARIA ASUSTADO DEL RUIDO Y DE OIR VOCES QUE NO CONOCIA
Soy enfermera desde hace casi 20 años y esa actitud de la que hablas yo no la he visto…a todas se nos encoge el corazon cuando hay que pinchar a un niño. Ni reñimos , ni asustamos…la mayoria somos madres y entendemos perfectamente a la criatura y a la madre. Seguramente hablas de algo anecdótico. Es INJUSTO que generalices. Pura demagogia. Por desgracia un bebé no entiende que le pinchas por su bien, por mucho que se lo expliques y su madre no va a soportar que le hagamos daño. Si algo se lleva mal en esta profesion, es ver como sufre un niño. Te crees especial por querer abrazarlos…que chorradas. Todas queremos abrazarlos y consolarlos…y lo hacemos. Por supuesto.
Se encuentran pocas personas como tu,a mi niña la tuvieron que sacar sangre, la amenazaron con no dejar entrar a su mama si no dejaba de llorar,también me dijeron que menudo genio se gastaba y que tenía mucha fuerza,la estaban agarrando a lo burro,pero lo más triste es que la propia pediatra que estaba de guardia en ese momento en el hospital,la cortó en el labio con el palito de madera al mirarle la garganta a lo burro,una lástima,pero cierto.
Mi marido siempre ha dicho que los médicos ,y personal sanitario en general , deberían pasar un test antes de ejercercer para saber cuales y cuantos son aptos para tratar con la gente, porque los hay que más que médicos o enfermeros parecen bestias, auténticos animales. Las personas mayores y los niños son los más indefensos y son a los que peor tratan.Yo vivo en Suiza , aquí la sanidad es privada y por lo general te tratan siempre bien.Mi médico atiende a mi hija desde que nació y cuando la tenía que revisar o poner las vacunas siempre le explicaba que iba a hacer, si le iba doler etc, jamás mi hija lloró, ni pataleó, ni hizo escandalo de ningún tipo cuando iba al médico.
Los hay que saben ser personas y los hay que son brutos sin más…
Enhorabuena por este post!! Qué suerte tienen los niños que atiendas tú. Te animo a que no te cortes si tienes que decir a algún compañero tuyo que trate mejor a sus pacientes niños. Tratarles así sólo hace que su inseguridad y miedo se agrave y la siguiente consulta sea peor! Mi bebé es muy pequeño todavía pero con las vacunas intento mimarle cuando llora y cuando sea más mayor haré caso de tus consejos e intentaré explicarle en casa la función de la analítica y demás pinchazos! Muchas gracias por este post!!
A nosotros nos pasó que fuimos a hacerle una analítica a la niña con 3 años (era la segunda vez así que ya sabía lo que había) y la amenazaron diciendo que si no se dejaba pinchar su madre y su padre se irían a fuera. Le dijimos que no, que su padre y su madre no se iban a mover de ahí y que hicieran el favor de no asustar más a la niña.
Me pareció una vergüenza.
Me encanta!! Ojalá fueran todos como tí..LA verdad que casi todos los profesionales que le han hecho pruebas a mi hija, sobre todo las más invasivas han sido muy amables con ella…Incluso en la última analítica que le tuvieron que sujetar el brazo yo la sujetaba por detrás dándole besos y aunque lloró estuvo muy tranquila, ponernos nerviosos y reñirles no soluciona nada….Es normal que lloren!! Besos!!
Didi, un post muy necesario, que demuestra que se puede ser un profesional sin perder ni la humanidad ni la sensibilidad. Y también oportuno, en el Día contra el Abuso Infantil. Un día en el que debemos recordar que los niños tienen derecho a vivir su infancia sin miedos, sin ninguna clase de maltrato, por muy leve que sea o pueda parecer. De verdad, muchísimas gracias por escribir sobre esta experiencia. Me pone los pelos de punta, pero a la vez me calma ver que estás allí para reconducir una actitud equivocada, y, al menos, ayudas a esos padres. Ojalá te leyeran todos.
MUCHOS BESOS, preciosa míaaaaaaaa.
Un post maravilloso… muchas gracias por escribirlo, a ver si remueve algunas conciencias 🙂
Que pena haber leido en este post que pasan cosas asi!! Nosotros por desgracia hemos pasado con solo dos añitos por muchas pruebas dolorosas..y la verdad nunca he tenido esta sensación. Tanto medicos como emfermeras nos han tratado de maravilla. Para mi lo peor en estos casos es en el quirofano. Mi hijo ha entrado ya dos veces..y en reanimacion no nos dejan estar. Y claro se despierta despues de una intervencion solo o con desconocidos. Por el resto mas que bien.
Desde aquí aprovecho para dar las gracias al HSJD de Barcelona.
Ojala hubiese mas profesionales como tu,si yo misma me mareo cuando tienen que hacerme una analitica y no soy una niña….imaginate un niño que no entiende ese dolor, a mi me apena verlos llorar y se me parte el corazon.
Ojalá todos pensaran como tú. A mi pequeño tuvieron que sacarle sangre, y cuanto mas lloraba el niño mas chillaba la enfermera, cuando le dije que por favor me dejaran calmarle me echaron de la consulta y a través del cristal vi como sujetaban a mi pequeño de 9 meses 4 adultos, en ese momento no sabía quienes eran los más inmaduros.
Ojala todos vieran las cosas como tu.Con lo facil q es ponerse en el lugar de esos angelitos.Quien nos viera a nosotros si llegara un gigante,nos agarrara a la fuerza y nos hiciera daño!!!! Nos desalariamos!!!! Sigue actuando asi!!!!!!
Estoy totalmente de acuerdo contigo. Yo ya he vivido esa experiencia. Este mes tengo que llevar a mi hija de 4 años a hacerse su tercer análisis de sangre en menos de un año y había que ver la insensibilidad del tipo que la agarraba y ni una palabra amable o tranquilizadora. Yo la abrazaba muy fuerte, pero sufría con ella de verla pasarlo tan mal.
¡Vaya! Parece que esta chica es buenísima y los demás somos todos unos mierdas.
Llevo 35 años trabajando de enfermera y matrona y jamás he visto a un compañero que no tratara a los niños con todo el cariño que merecen; y desde luego si alguna vez lo viera, tomaría las medidas oportunas para no consentirlo. Este comentario nos ofende injustamente al personal de enfermeria
No tienes porque ofenderte si tú no eres así. Claramente, dijo la chica, que no se generalice con este escrito. Es como decir que todos los políticos son iguales porque estamos en crisi.
Esta muy bien hablar de la experiencia personal porque siempre sirve a los demás.
Chica, yo no sé en qué servicio trabajarás, pero en mi experiencia como enfermera nunca he visto que se grite o riña a los niños ante una prueba invasiva. Respecto a sujetar el brazo a un bebé para pincharle… pobrecillo, lo normal es que esté en brazos de su madre y tranquilo, pero si no le sujetas ya me dirás que colaboración puede tener un niño tan pequeño… Y la presencia de los padres, en según qué casos también es más que cuestionable, a veces no saben ni tranquilizar a sus propios hijos.
madre mia como entiendo a esos pequeños por que a mi hasta hace nueve meses me pasaba lo mismo lloraba cuando me sacaban sangre.Me quede embarazada y ya se sabe tantas pruebas y tanto sacarte sangre te acostumbras.A mi hijo con tres meses y medio le pasa lo mismo no puede ver a ningun hombre con bata se pone a llorar desconsolado aunque no sea para las vacunas lo pasa fatal y solo sea para las revisiones.
Gracias por llevar ese dibujo por ser empatica con nuestros asustados niños. ..por desgracia a mi hija le han hecho ciwntos de analiticas y pruebas de alergias…jamas consiento que sea por la fuerza y siempre la he sentado en mi regazo abrazandola y intentando que estuviera lo mas tranquila posible ….solo una vez he tenido un encontronazo y fue por hna vacuna puesta a traicion, no sabiamos que esa revision tocaba vacuna y se la pusieron como a un toro la banderilla…puse una reclamacion a la enfermera y desde e tonces a mi niña la tratan mejor , dandola su tiempo….
Realmente es un tema importante. ¿Cómo puede ser que se vea normal a los niños llorando en una consulta médica? Se entiende cuando ya les han hecho daño (por ejemplo un pinchazo), pero no en una consulta. Los niños se sienten agredidos, y es solo con el personal que no los sabe tratar, eso está confirmado. Yo estoy pensando en que tipo de campaña se podría hacer para que esta situación vaya cambiando.
¿Y si nos unimos y pensamos entre todos?
Justo hoy llevé a revisión a mi bebé de 6 meses y estoy muy sensible con el tema, la hicieron acostar cuando la podían revisar encima mío, la tocaron con manos muy frías, la tuvieron sin ropa innecesariamente en una consulta fría. Yo debatiéndome entre protestar o esperar a que la vacunaran por lo importante que es para su salud.
Me ha encantado tu post yo soy madre de una niña de tres años y un nene de 6 meses y gracias a dios no he tenido nunca que hacerles analisis ni pruebas medicas mas alla de las vacunas pero estoy totalmente de acierdo contigo y me he hecho gracia lo de tetanalgesia porque yo la he usado con los dos en todas sus vacunas mientras aun le daba pecho, y por supuesto tengo comprobado ya que consigues mil veces mas cosas con ellos negociando y con cariño que a las malas.muy buen post si todo se hiciera con cariño y paciencia hariamos de nuestros hijos mejores personas.
Totalmente de acuerdo contigo. Yo tengo dos niños uno de 12 y la peque de 6, Mi hijo era graciosísimo cuando le iba a vacunar se ponía a chillar antes de que se la pusieran, y yo le preguntaba: ¿porqué chillas antes de que te la pongan?? y él me decía, porque así me duele menos mamá, jajaja, que chicos. La peque es diferente, nunca le ha gustado ir al pediatra o al médico, se ponía histérica y para explorarla siempre había que sujetarla para que no se moviera, a mi me dolía el alma, hasta que un día le expliqué que si se dejaba mirar nadie le haría daño, que le hacíamos más daño sujetándola que si se dejaba mirar, lo comprobó por si misma y ya no hace falta sujetarla, ahora le toca vacuna y no se como reaccionará, miedo me dá pero espero que entienda que es por su bien.
Estoy totalmente de acuerdo con tu opinión. Yo misma me tuve q pelear con una doctora que no quería q me quedara mientras ponían una vía a mi peque de 2 años. Mi marido incluso me dijo q fui hasta borde…. me daba igual, no pensaba dejar sola a mi hija mientras unas desconocidas le hacían daño. Conseguí quedarme y consolar a mi hija mientras la pinchaban y cogerla en brazos hasta que se le pasó. Y lo volveré hacer si vuelve a ocurrir, y seguiré consolando a mi hija cuando llore dolorida y llena de miedo.
Hola
Estoy de acuerdo contigo en casi todo.
En qué discrepo, en que por desgracia, los profesionales sanitarios que hacen las cosas bien con los niños no son tan numerosos y frecuentes como podría parecer por tu aclaración final.
Los que son buenos son maravillosos, pero sólo uno malo dejará en los niños que «atienda» un recuerdo imborrable de rechazo a «las batas blancas».
Quizás este comentario pueda parecer pesimista o duro, pero creo que hay que llamar a las cosas por su nombre…
Saludos
Cuanta razón…y no porque yo lo haya vivido…a mi peque de 5 años, le ha tocado un pediatra y una enfermera que son un cielo ( gracias de nuevo Francina i Josep Lluis), paciencia, buen humor, tranquilidad, al fin y al cabo están tratando con niños, no lo olvidemos!!! Incluso en unas pruebas de alergia que tuvieron que hacerle cuando era peque, la enfermera que le sacó sangre fue muy amable, le tranquilizó,,.. charló con él sobre dibujos,…y todo fue a las mil maravillas!!!
Qué casualidad que personal que lleva muchos años de servicio, no haya visto una actuación como la que se describe aquí y yo que soy madre desde hace sólo tres años, sí… Me parece que ofenderse por decir que hay de todo, como en todos sitios, es una postura si más no, fuera de lugar. Esta señora, no dice en ningún momento que todo el personal sea de la misma calaña.
Habrá neci@s y encantos como en todos sitios, o es que para ser enfermero te exigen que reboses de simpatía, filantropía y alegría? Otra cosa es el código deontológico, que tampoco siempre es respetado pero en fin. El que se molesta es porque algo le pica.
Respecto al post, se me ocurre, ¿No te permitirían colgar un póster tipo dibujos con representaciones emocionales? Algo que les transmita esa visión de que lo que está ocurriendo es totalmente normal y adecuado a la edad de la personita. Algo que les haga reflexionar a los padres. La violencia no está permitida, así que yo creo que incluso se podría aclarar abiertamente que no deben gritar, menospreciar, insultar o pegar a sus hijos por estar asustados y demostrarlo abiertamente. Tal vez no cambiemos mucho pero seguro que conseguiríamos que algún pater-mater recapacitase, ¿NO?
Un saludo y gracias por regalarnos tu tiempo.
Mi hija tiene ahora 5 años, y padece hipotiroidismo congenito, por lo cual, desde el 7º dia tiene que hacerse analiticas, antes cada 3 meses ahora cada 6. Ella su mucho, pero lo peor es qe yo tambien sufro, solo he podido entrar una vez con ella, porque suele hacerlo mi marido que es mas firme, para procurar que no se mueva demasiado, yo lloro afuera escuchandola llorar. De más pequeña, le hacian el analisis de hormonas en el H. Civil de Málaga y no dejaban pasar, ahora es en el materno de aquí y las ATS son fantasticas, muy agradables con los niños. Les doy las gracias desde aqui, por su paciencia y su profesionalidad.
Didi!!! Me encantó tu reflexión… siempre me pregunté por qué algunos padres se enojan con sus peques por llorar en el hospital cuando los van a atender… Por otro lado, y lamentablemente, también he visto personal sanitario riéndose y burlándose del llanto y del temor de los niños…
Deberíamos ponernos en sus zapatitos más a menudo… a veces pretendemos que sean y piensen como «adultos»… cuando muchos adultos ni siquiera van al médico por cagazo… De esos conozco muchos…
Un besazooooo…. muak
Mis hijos en el especial el mayor le tiene pánico a las agujas, se vacuna todos los años de la gripe y hacemos de todo para conseguir tranquilizarlo. Te mentiría si ahora te dijera que este año después de haberlo intentado todo, le amenacé con irme de la sala donde el enfermero le pinchó.
Va a cumplir 8 años, es pequeño para muchas cosas, hasta ahora jamás nos habíamos enfadado con él por su temor, pero este año, después de haberle explicado que entendemos que no le guste, de haber razonado con él que es normal que le doliera un poco, de haberse vacunado su padre primero para que él lo viera, de dejar que él decidiera dónde ponerse la vacuna, después de darle su tiempo para que reflexionara y se sintiera preparado, después de haber hablado con él, de besarle, de darle la mano para que apretara la mía si era necesario, de cantarle al oído la canción que le tarareaba cuando era pequeño (normalmente le tranquiliza mucho) una hora después de todo esto, seguíamos igual. Gritos desesperados y patadas compulsiva. Por lo que yo tuve que salir de la habitación, y su padre sujetarlo para ponerle una vacuna, quizás no estuviera bien, pero la paciencia tiene un límite y ya tiene que entender que todos a veces soportamos cosas que no nos gustan, por ejemplo los pinchazos.
Posiblemente su papá y yo lo pasamos tan mal como él, porque es desgarrador oír a tu hijo llorar por algo tan natural como es el miedo al dolor.
Pero…¿Qué otra cosa podía hacer? ¿no vacunarle? Lo tiene que hacer por prescripción médica. No es fácil para una madre ni para un padre, tomar algunas decisiones, pero a veces…
Nunca pensaría desde luego que por ello mi hijo es malo, o maleducado, tan sólo tiene mucho miedo.
Un beso
Soy enfermera. Actualmente no trabajo con niños,pero lo he hecho y sé lo que implica. Estoy totalmente de acuerdo contigo. No todo el mundo sirve para tratar con niños,es un autoanálisis que debemos hacernos los profesionales…
Por suerte, también hay muchos otros grandes profesionales que sí saben hacerlo…
Chapó por tu escrito.
Besos
No se donde resides, pero ¡¡¡¡vente para Vigo !!!!! .Aquí nos hace falta profesionales tan humanos como tu.
Yo tengo muy malas experiencias con algunos (no todos) una de las mas suaves
Me dicen que me llamaron para hacer unas pruebas muy importantes que tenia que hacer mi hija mayor, y que yo esperaba con ansia, con el teléfono en la mano todo el día, viendo que no me llaman…….
Llamo por teléfono la planta donde le tienen que hacer las pruebas, explicándole que en poco tiempo tengo que ir al medico a buscar los resultados. Y sin preguntarme ni el nombre de la niña me dicen que hay muchos niños esperando y que mi hija no es especial que tengo que esperar y me cuelgan el teléfono, me quedo si palabras.
Llamo al hospital para hablar con la enfermera del medico que tiene que ver esos resultados y le explico lo que me acaba de pasar……respuesta. No te preocupes tu ven a la cita con el medico igual aunque no te llamen para hacer la prueba.
El día que tengo la cita me presento (sin las pruebas) como la enfermera me indico y cuando me siento el medico me dice
¡¡QUE HACE USTED AQUÍ QUITANDOLE EL SITIO A UN NIÑO QUE LO NECESITA!!!
Yo incrédula le pregunto.¿como? ¿porque?mi hija no lo necesita. y me contesta
SI ES USTED UNA MALA MADRE Y NO SE PRESENTA A LAS PRUEBAS NO ES MI PROBLEMA.
Tenia una hoja tamaño folio donde ponía que no me había presentado a las pruebas……..
UFFF, sin comentarios,
Después de intentar calmarme porque casi pierdo los nervios, le explico todo lo que paso y sin pedirme ni disculpas me envía a planta a pedir otra cita.
Y para resumir, cuando paso esto mi hija tenia 3 años ahora tiene 8 y cada vez que tengo que ir con ella al hospital o al especialista ¿sabes que me pasa ?
APARECE PAPEL TAMAÑO FOLIO, DONDE PONE QUE NO ME PRESENTE A ESA DICHOSA PRUEBA CON MI HIJA Y TENGO QUE ESCUCHAR DEL MEDICO .¡¡¡Y HABER SI NOS PRESENTAMOS A LAS PRUEBAS!!!, TIENE QUE HACER POR PRESENTARSE A LAS PRUEBAS CON LA NIÑA.
Y ASÍ LLEVO 5 AÑOS.
El miedo que tengo es que un día me cojan con el animo bajo y pierda los nervios en la consulta y después sera culpa mía.
Y te aseguro que es de las cosas mas suaves que me tienen pasado
Didi, para imprimir y enseñárselo a más de uno! Totalmente de acuerdo con tu reflexión y tu forma de exponer el problema. Entiendo cómo te sientes, porque yo me sentiría igual que tú. Pero es qeu son niños, por favor, algunos que no saben ni hablar… en fin, lo dejo porque estas cosas también me indignan mucho.
Ufff no sabes como te entiendo ¡¡¡¡ el otro día le tocaba la revisión de los 4 años …con vacuna incluida ¡¡¡ y madre mía la que monto mi peque ¡¡¡ pues el g…….de su pediatra no tiene otra cosa que decirle porque mi hijo seguía llorando después de la vacuna , que sino paraba le ponía dos mas ……ya te digo yo donde se puede meter las vacunas el ……lo siguiente que hice fue cambiarle de pediatra……
un medico enfadadisimo me regaño por chillar de dolor cuando estando de parto me introdujo la mano y giro al bebe que tenia el cordon al cuello. no solo regañan a niños…
Me parece un poco facilón tachar practicamente d ‘maltratadores’ a personas q entregan su vida día a día en curar a esos niños a pesar de sus lloros, y su poca colaboración en muchos casos, haciendo de tripas corazón para conseguir hacerles pruebas sofisicadas o complejas…
A todos esos pediatras y enfermeras q eligieron su profesión por vocación y con tanto esfuerzo se entregan día a día a situaciones dolorosísimas también para ellos, a todos ellos un aplauso!!
Q fácil es hablar por hablar sin conocimiento d causa!!
Sin conocimiento de causa????
Llevo 20 años trabajando de enfermera, así que conocimientos tengo bastantes. Y, evidentemente, hay muchísimo personal sanitario entregado, atento, solícito, que lo da todo por los pacientes. Pero, lamentablemente, también hay gente cansada de trabajar, gente con problemas personales que lo paga tratando mal a los pacientes,gente que no debería seguir en la profesión, es una pena, pero es así.
En todas las profesiones hay grandes personas y otras mediocres.
Mi hija es alérgica a varios alimentos, por lo que cada seis meses tocan análisis y pruebas cutáneas con sus correspondientes pinchazos. he tenido la suerte de encontrar siempre profesionales que han intentado entretenerla para hacer esas pruebas lo menos dolorosas posibles, pero en el último análisis,ella que ya va siendo más mayorcita y sus miedos también, se asustó mucho y tuvimos que »inmovilizarla» entre una de las enfermeras y yo. Ellas no dejaron de tratarla con cariño mientras yo la hablaba bajito y la intentaba tranquilizar. No me entra en la cabeza tratarla de otra forma en un momento así, pero si hasta yo lo paso mal por ella y casi termino llorando también. Aprovecho tu post para agradecer al personal de hospital Infanta Leonor de Madrid por el trato que hemos recibido siempre, a pesar de lo que nos está cayendo en la sanidad madrileña. Me alegro que haya gente como tu. gracias.