La semana pasada se celebró el día del libro y tenía ganas de hablaros de este que tengo entre las manos, pero como casi siempre, el tiempo se me va y no me puedo hacer todo lo que quiero.
Este libro me resulta particularmente prometedor por el tema del que habla: la menstruación y la vida sexual femenina, orientado a niños pequeños. En esta sociedad en la que parece que todo esto es un tabú, ya no tanto el sexo, pero sí el ciclo menstrual, me parece fenomenal tratar este tema de un modo natural desde que son pequeños.
Cuando escribí sobre la copa menstrual, muchas madres me dejaron comentarios sobre que la menstruación les resultaba “sucia” y no querían tener que mancharse. Y tratando con madres en general, he visto que esta situación se da en bastantes ocasiones. Muchas madres no están cómodas con su menstruación, con tocarla, con explorarse.
No es de extrañar si crecimos en un ambiente en el que esto era tabú, en el que convertirse en mujer era una pena. Yo no soy tan mayor, bueno, según cómo se mire…pero os aseguro que en mi adolescencia escuché cosas como que no había que mojarse, que no había que lavarse el pelo e incluso que no se podía tener sexo si estabas menstruando. Creo que esos comentarios ya van desapareciendo y por suerte las más jóvenes no los habréis escuchado, pero aún persiste mucho desconocimiento sobre el ciclo menstrual.
Hace unas semanas, Lucas vino de clase preguntándome sobre el tema. Una de sus compañeras había tenido un accidente y se había manchado la ropa y rápidamente el resto de las chicas le ofrecieron compresas y tampones, mientras los chicos se quedaban cuchicheando sobre el asco que les daba. Le reprendí un poco, sobre todo por el hecho de hablar de la chica a sus espaldas y hacerle sentirse incómoda. Le pedí que se pusiera en su lugar en otro tipo de situación incómoda para él, ¿cómo se sentiría si hablasen y se riesen de él? Evidentemente mal, así que no creo que vuelva a pasar. Y ya aprovechamos para hablar un poco del tema y hacerle ver que no es nada malo tener la regla, que gracias a que las mujeres tenemos ciclo menstrual, ellos han llegado al mundo. El cuerpo de las mujeres es una máquina precisa y maravillosa.
En casa es algo bastante natural. Yo no tengo ningún tipo de problema con mi cuerpo, al contrario. Es cierto que no hago una fiesta cuando me viene la regla, sobre todo porque en general me duele unos días y porque tengo un problemilla en el ovario derecho que me suele dar problemas cuando ovulo por ese lado. Pero desde que uso la copa menstrual, estoy mucho más tranquila porque no tengo accidentes y me olvido de ella durante horas. Mis hijos me han visto cambiarme tampones y compresas cuando los usaba y ahora también me ven vaciar la copa. Haciendo de esto un acto natural, ellos lo verán igual de natural cuando sean mayores. Me explico bien: me cambio delante de ellos si da la casualidad, sentada en el w.c. con lo que NO ven sangre ni coágulos ni les llamo para que vengan a cosa hecha cuando me voy a cambiar, ni meto las manos en mi vagina para sacarlas con el flujo menstrual y jugar con mis hijos…
Y ahora a lo que iba, este precioso cuento. El Tesoro de Lilith es un cuento sobre la sexualidad, el placer y el ciclo menstrual. ¿Qué mejor regalo que acompañar a las niñas a conocerse y a amarse a sí mismas a través de un cuento? ¿Cómo hablar con nuestras hijas, nietas,… sobre el placer, la sexualidad, el cuerpo, la menstruación…? ¿Cómo fortalecer el vínculo de comunicación y confianza entre madres e hijas en la infancia? ¿Somos conscientes los padres y educadores que en la infancia la sexualidad y el placer a través del cuerpo es algo natural y positivo?
El cuento está escrito, ilustrado y autoeditado por Carla Trepat y cuenta con una completa guía didáctica a cargo de Anna Salvia Ribera, psicóloga especializada en Salud Sexual. Os dejo este vídeo explicativo para que sepáis más del cuento, a mí me ha gustado mucho y lo usaré de ahora en adelante para explicarle a Sara todo sobre su naturaleza femenina.
En este enlace podéis conocer más sobre el cuento, la autora, su proyecto y cómo comprar el libro. Espero que os guste tanto como a nosotras.
Comentarios en: "De cuentos y ciclos menstruales" (5)
Diana. Una cosa es tratarlo como algo natural y con respeto. Otra bien distinta «explorar la sangre y coágulos con tus manos», y enseñar a tus hijos la menstruación. Yo respeto lo q tu hagas. Pero vaya, me parece que pierdes de vista que por mucho que nos amemos y tal, sangramos una vez al mes. Algunas más que otras, en ocasiones con bastante coágulo oscuro, su olor especial, intenso, etc. Vamos. Que no es nada agradable y ni se me ocurre enseñarlo orgullosa así sin más. Ni a mi mejor amiga, mi a mi marido, mi a mis hijos pequeños. Cuando mi hija sea más mayor, sí le enseñaré que esto le pasará y le hablaré cómo tu dices de la maravillosa naturaleza de nuestro cuerpo. Pero ya. Saludos,
Yo no he dicho que explore la sangre con mis manos y se la enseñe a mis hijos. He dicho que no me escondo, que ellos me han visto cambiarme porque lo he hecho delante de ellos pero no les he pedido que mirasen ni se lo he mostrado.
Y yo sí que no tengo problema en mancharme, es parte de mí, luego te lavas las manos y listo. ¿qué haces si por casualidad un día se te cuela un tampón en la vagina y no puedes sacarlo? ¿te vas al médico? Vamos que la vagina no es tan profunda, metes los dedos, lo sacas y listo.
A veces hay que saber leer, mi hija me pregunta y yo se lo explico pero todavía no le he enseñado la copa menstrual llena para que la analicen… Ni voy orgullosa enseñándoselo a las vecinas…
Nunca había oído q hubiese ese tipo de cuentos. Yo le explico a Fran cosas, pero aún muy por encima. En el embarazo, íbamos viendo videos de como se iba formando y desarrollando su hermana. Me parece muy interesante, y la verdad, dan ganas de comprarlo para el día de mañana.
Muy interesante el libro y lo de tratar con naturalidad el tema de la menstruación con los hijos. Entiendo lo que dices, es como cuando vas a hacer caca, si M me sigue (tiene 17 meses) pues le explico lo que estoy haciendo y punto, pero no le muestro nada. Entiendo que con la regla es algo similar porque al fin y al cabo es parte de la naturaleza
A mí me lo descubrió Gisela, del blog Para el bebé, hace unas semanas, y creo que es una iniciativa estupenda para concienciar a las niñas acerca de su cuerpo. Mi bichilla aún es muy pequeña, pero estoy asombrada de la cantidad de libros que nos acercan temas trascendentales de una forma tan didáctica.