No hay mejor lugar que los brazos de mamá

Entradas etiquetadas como ‘150 palabras’

150 palabras: cereza, niño, punto

En el huerto del abuelo había un cerezo. El niño iba todos los años a visitar a los abuelos, pero nunca se había fijado en el árbol.

Ese año, fue diferente.

Mientras exploraba el jardín, llegó al árbol y lo encontró ¡lleno de cerezas! ¡Que bonitas eran! ¡Que rojas! Se sentó bajo el árbol, a contemplarlas y así pasó varias horas.

Al día siguiente, volvió al mismo lugar. De pronto, se fijó que una cereza temblaba. El niño pensó un rato y tuvo una idea. «Ahora vengo», dijo, y salió corriendo.

La cereza temblaba aún más. Temblaba de miedo a ser comida, pensó que sus días habían terminado.

El niño regresó con una enorme sonrisa, cubrió a la cereza con un paño de punto y le dijo que él cuidaría de que no tuviese frío, ya podía dejar de temblar.



150 palabras: sueño, huevo, elefante

Mamá y Alex pasaron un divertido día en el zoo. Vieron cantidad de animales, y aprendieron muchas cosas de ellos.
Cuando llegaron a casa, Alex estaba tan cansado que se durmió en el sofá y mamá le llevó a la cama con cuidado, a soñar toda la noche.
Cuando se despertó, olía a bizcocho recién hecho. En la cocina, Alex le contó a mamá que había tenido un sueño. Todos los animales del zoo estaban libres y tenían súper poderes. El elefante era el jefe de la manada, podía volar y ponía huevos. A mamá le dio un ataque de risa.
-Alex, los elefantes pesan mucho para poder volar, y además, son mamíferos.
-¿Qué es un mamífero?
-Pues es un animal que nace directamente de su madre y que se alimenta de su leche- le dijo, mientras Alex se acurrucaba en su regazo y tomaba su desayuno favorito, teta de mami.



150 palabras: investigación, valientes, esperanza

En una casita verde vivían Luk y sus padres. Querían tener otro hijo, pero no se quedaba embarazada.

Después de mucho tiempo de espera,  y tras meses de investigación, descubrieron el problema. Hacía falta un tratamiento, sería difícil, pero no perdían la esperanza… Y lo consiguió, se quedó embarazada.

Pasaron los meses y Luk estaba muy emocionado, pronto iba a tener una hermana, Maya.

Una mañana, mamá empezó con contracciones. Luk se puso muy nervioso. Mamá le dijo que tenía que ir con los abuelos. Él se puso triste, quería estar con mamá. Mamá le explicó que todos tenían que ser muy valientes y esperar un poco.

Poco rato después, sonó el teléfono. ¡Su hermana ya había nacido! Ya era hermano y tenía mucha  prisa por llegar al hospital. Cuando llegaron y la vio en la teta, se enamoró y supo que ser hermano mayor era lo mejor del mundo.



150 palabras: veo-veo, topo, cometa

Osaku era el hijo mayor del jefe de los vikingos. Un día, Topo, un chico de su tribu, le contó que su padre quería conquistar la aldea vecina.
Osaku se puso triste, el amor de su vida viví allí. No podía consentirlo.
Por la noche, salió sigilosamente, sin que nadie le viera. Al regresar por la mañana, fue en busca de su padre y lo llevó a dar un paseo. Al llegar a las colinas, vieron una cometa mecida por el viento. Osaku le dijo a su padre:
Veo-veo
– ¿Qué ves?
– A la muchacha más hermosa del mundo
El rey se quedó embobado mirando a la chica que sostenía la cometa. Osaku le explicó que todas las personas eran igual de bellas y tenían derecho a vivir, no estaba bien conquistar y matar.
El rey lo entendió y decidieron unirse a otras aldeas y ser todos unos vikingos felices.



150 palabras: violeta, caracol, educación

La princesa Violeta estaba aburrida en su castillo. Tenía un montón de cosas con las que jugar, pero quería algo más, necesitaba conocer el mundo. Sola como estaba, no sabía qué hacer.

Se asomó a la ventana del gran torreón. Había dejado de llover, todo olía a humedad. Ensimismada en sus pensamientos, no notó como un caracol subía por la pared, lentamente, hasta que llegó cerca de su mano.

Pensó en la ironía del asunto. Ella encerrada en su castillo y el caracol encerrado en su casa. Pero él se podía mover. Y ella………..

¡Ella también! En el castillo había una gran biblioteca, llena de libros, construida por el Rey para su educación. No entraba mucho, pero a partir de ahora, lo haría. Leería sobre viajes, estudiaría otras culturas, viajaría por el mundo con su imaginación. Y cuando un día saliera del castillo, sería la princesa más lista del reino.